234.- Pilar en el Monasterio de San Jerónimo II.

Probablemente aquí traigo uno de los pilares más desconocidos hasta la fecha de Granada, se encuentra en el Monasterio de San Jerónimo,pero en un claustro que es de uso exclusivo de las monjas que allí hacen clausura. 

Sin embargo el Monasterio de San Jerónimo es visitable, y además los Domingos ofrecen a través de la empresa Pórticos unas visitas guiadas a las 11:00 de la mañana, que nos adentran en lugares distintos y diferentes del Monasterio y que no están incluidos en la visita común. Gracias a uno de sus miembros Rafael Villanueva hemos obtenido estas bellas fotos del pilar, que aunque parezca mentira, se puede ver con un poco de suerte, pues desde uno de los pasillos del claustro hay unas puertas cerradas de cristal que dan a este patio de la clausura. Pues bien, dependiendo de la época del año, de la vegetación del árbol y de nuestra agudeza visual al fondo se ve claramente el pilar adosado a una de sus paredes. 

El pilar es de estos pilares que solemos considerar bellos, con total seguridad su destino inicial fue este Monasterio, y aquí sigue a fecha de hoy, sigue los cánones de los bellos pilares de Granada, en primer lugar, una pila en este caso rectangular y  que está dividida en tres casetones con decoraciones geométricas. 

El frontal es muy, pero que muy similar al pilar que hemos visto en la entrada 235, tanto que casi no me cabe duda que ambos son creados por la misma persona, incluso habría que plantearse si el pilar de la calle San Jerónimo tuvo en primer lugar su origen en el Monasterio de San Jerónimo, que a lo largo de los años sufrió numerosos avatares y expolios. 

En este frontal destacan dos bellos mascarones de los que brotan el agua, y unas columnas a ambos lados y en el centro que delimitan los dos casetones con los mascarones. 

Sobre la cornisa recta, que corona el pilar un frontón semicircular con una pequeña imagen de la virgen, y en vez del típico yelmo heráldico o escudo de armas de alguna familia noble, un pequeño escudo con una virgen, estando el conjunto rematado por una corona. 

Fotos gentileza de Rafael Villanueva, guía del Monasterio de San Jerónimo.